Los derechos humanos son estas normas que determinan y protegen la dignidad de todas las personas sin importar su raza, género etc. Por otro lado, es importante mencionar que éstos ayudan a la integración en la sociedad y cómo deben comportarse dentro de ella.
Ley vs. Realidad
Es un hecho que en materia de derechos humanos, especialmente dirigido a migrantes, el país presenta ciertas debilidades en cuanto a su aplicación y respeto. Del mismo modo, la Constitución Mexicana y la Ley de Migración prohíben la discriminación por origen étnico, nacionalidad, género, religión, condición social o económica, y garantizan la igualdad de derechos para todas las personas, incluidos los migrantes. Sin embargo, la realidad es que mucho migrantes, especialmente los indocumentados, enfrentan discriminación sistemática, ya sea en el acceso a servicios básicos, oportunidades laborales o por parte de autoridades. Las prácticas xenófobas y la estigmatización hacia los migrantes centroamericanos son comunes.
De aquí emana la relación en donde se tiene que trabajar en la aplicación de leyes no en realizarlas, esto debido a que se tienen las leyes, fundamentos y constituciones suficientes para hacer valer los derechos de cada persona migrante fuera de su país de origen, pero lamentablemente se vive en una sociedad, donde pasa todo lo contrario.
Otro ejemplo sumamente visible es el derecho a la salud, la ley dicta que todos los migrantes, independientemente de su situación migratoria, tienen derecho a recibir atención médica en México, en particular en situaciones de emergencia. Pero por otro lado, tenemos la realidad y lo que miles de personas viven día a día y es que en muchas ocasiones, los migrantes no tienen acceso adecuado a servicios de salud, ya sea por desconocimiento de sus derechos, barreras lingüísticas, o discriminación en hospitales. Además, la capacidad de los albergues para ofrecer atención médica es limitada.
Dicho lo anterior, se puede decir que las mismas instituciones no están realizando la divulgación de información necesaria para aquellas personas que no cuentan con ella. Pero si observamos un poco más de cerca, las mismas instituciones tampoco cuentan con el espacio e insumos mínimos para que las personas puedan ser atendidas, implicando todas las faltas de interés de un gobierno hacia su población y personas que residen en su país.
El marco legal en México garantiza una serie de derechos fundamentales para los migrantes, alineándose con los estándares internacionales de derechos humanos. Sin embargo, la realidad muestra una disparidad significativa entre lo que estipulan las leyes y lo que ocurre en la práctica.
Las dificultades para cumplir con estos derechos se deben a una combinación de factores: la falta de recursos, la corrupción, la discriminación estructural y la influencia del crimen organizado en las rutas migratorias. Es imperativo reforzar los mecanismos de protección, mejorar el acceso a los derechos y asegurar que las leyes sean aplicadas de manera justa y efectiva para todos los migrantes en el país.
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